Fundación Naturgy / V3.2 / Módulo profesional de Sostenibilidad aplicada al sistema productivo
86 I Este nuevo modelo económico circular implica un diferente enfoque en cada una de las fases del proceso productivo y de vida útil de los productos: 1. Ecodiseño: el producto desde su origen debe estar diseñado para que forme parte de sistemas circulares. El ecodiseño implica un enfoque que permita: (i) reducir la cantidad de materias primas primarias y materiales necesarios para su producción; (ii) maximizar su vida útil a través de la reparación y reutilización de productos y (iii) facilitar la recuperación de materiales y materias primas una vez finalizada la vida útil del producto. 2. Obtención de materias primas: debe priorizarse la obtención de materias primas sostenibles y secundarias, es decir, aquellas que se obtienen a través de la recuperación de materiales y materias primas de los residuos generados en los procesos productivos. 3. Producción: utilizando materias primas secundarias y minimizando tanto la generación de residuos como el consumo de materias primas y energía. 4. Uso (vida útil): debe buscarse la máxima durabilidad del producto, facilitando su reparación, mantenimiento, reutilización, renovación y readaptación. 5. Tratamiento de los residuos: el tratamiento de los residuos generados debe estar enfocado a la remanufactura y reciclaje, facilitando su transformación en materiales y materias primas secundarias que originen un nuevo proceso productivo. En el documento Transición hacia la economía circular. Guía para Pymes financiado por la Fundación ICO y elaborado por la UNED en 2020 encontramos recomendaciones y ejemplos en el camino hacia la evolución de tres de los sectores prioritarios según la Estrategia Española de Economía Circular “España 2030”: la industria de la construcción, la de la alimentación y la textil. Para las empresas, las prácticas circulares pueden impulsar la competitividad al generar nuevas fuentes de ingresos a través de nuevos modelos de negocio, reduciendo los costes de materiales, estimulando la innovación y reduciendo los riesgos asociados a la interrupción de la cadena de suministro y la volatilidad de los precios de los recursos. Debido a las diferencias existentes en los sectores productivos y a la influencia de los distintos factores, la integración de la economía circular en el modelo de negocio puede tener un mayor o menor potencial de crecimiento. De esta forma, en el gráfico a continuación se observa cómo los sectores de los plásticos y envasados, la moda y textil, o la alimentación y agricultura tienen un alto potencial de crecimiento a corto y medio plazo; mientras que sectores como la gestión de residuos y el agua, la fabricación industrial o papel, pasta y productos forestales están en un potencial de crecimiento creciente.
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