Fundación Naturgy / La Contribución del sector energético español a los objetivos sociales europeos

28 Salario y beneficios sociales Esta calidad del empleo también se ve reflejada en la mayor flexibilidad y posibilidad de conciliación que el sector de la energía brinda a sus empleados. En este sentido, son muchas las compañías del sector que tienen en marcha diferentes medidas de flexibilidad del tiempo de trabajo. Según el análisis realizado, un 86% de las compañías declaran disponer de este tipo de medidas para sus empleados. Entre las medidas destacan el teletrabajo, horario flexible de entrada y/o salida, la jornada intensiva en verano, bolsa de horas, reducción de jornada, adaptación de los horarios de descanso, políticas de derecho a la desconexión digital, entre otras. Respecto de las mejoras de los permisos legales, destaca la ampliación voluntaria del permiso de paternidad así como las mejoras en las condiciones y permisos establecidos para casuísticas de índole personal y familiar. Adicionalmente, algunas compañías ofrecen servicios para facilitar las gestiones diarias de los empleados como el banco del tiempo, servicios de limpieza de ropa, tintorería, entre otros. Todas estas medidas ayudan a que los empleados en este sector compaginen mejor su vida profesional y personal, repercutiendo de manera positiva en la percepción que tienen los trabajadores de dichas compañias, su bienestar y la satisfacción en sus puestos de trabajo. Seguridad laboral El hecho de que la energía sea un bien necesario y esencial ha minimizado el efecto de las fluctuaciones económicas en el sector, y esto ha repercutido en el empleo directo generado, que se mantiene más estable a lo largo de los años 26 . En concreto para las actividades de suministro de energía eléctrica, vapor, gas y aire acondicionado (*), se ha analizado la evolución de los puestos de empleo directo frente al valor de la producción, reflejándose en la gráfica que, pese a las variaciones en las cifras de producción, las fluctuaciones en los niveles de empleo han sido menores con una tasa de crecimiento anual compuesto ente el año 2014 y 2019 de (~1%) frente al del valor de la producción que triplica su valor (~3%). Debido a la pandemia, el número de personas afectadas por Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTES) y Expediente de Regulación de Empleo (ERES) se ha incrementado significativamente en gran parte de los sectores de la economía. No obstante, según fuentes del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, el porcentaje de afiliados a ERTE en el sector energético desde el inicio de la pandemia (marzo 2020 a marzo 2021) se ha mantenido prácticamente nulo en términos porcentuales con respecto al resto de sectores 27 . No obstante, teniendo en cuenta el momento actual de cambios que viven las empresas del sector en el contexto de la transición ecológica, algunas grandes compañías han planteado en los últimos meses medidas para la la transformación de sus plantillas, a través de desvinculaciones pactadas e incentivadas. Si bien es importante señalar que estos ajustes no afectan a la totalidad del sector y responden a una necesidad actual. Según el PNIEC, en los próximos 10 años el sector eléctrico experimentará un crecimiento del empleo neto positivo, creando 1.700 empleos anuales en 2030 2 . (*) Clasificación por CNAE. El hecho de que la energía sea un bien necesario y esencial ha minimizado el efecto de las fluctuaciones económicas en el sector , y esto ha repercutido en el empleo directo generado, que se mantiene más estable a lo largo de los años.