Fundación Naturgy / Empleos que demandará el sector energético

121 Tan relevante como la medición del nivel medio de competencias lo es el conocimiento de su distribución entre el alumnado. Por ello, la Figura 4.11 presenta los resultados en las mismas tres competencias en diversas partes de su distribución (25 por ciento inferior; 75 por ciento superior; y por niveles de rendimiento) 16 . Tal y como se observa, la distribución de resultados de España en matemáticas se encuentra especialmente desplazada hacia la izquierda; en otras palabras: la mayor parte del alumnado español se concentra en los niveles bajo e intermedio. De forma similar, aunque no tan acusada, se observa una distribución similar tanto en ciencias como en lectura. Resulta a su vez de interés señalar el escaso número de alumnos en el nivel avanzado, en términos internacionales, de todos los países de referencia. Ahora bien, la situación de España y Francia resulta especialmente preocupante. Por ejemplo, España cuenta con un 37%, 52% y 49% menos de alumnado en el nivel avanzado de matemáticas, ciencias y lectura, respectivamente, que Alemania. Por tanto, en el caso de España se identifican déficits en el proceso de transmisión de competencias, especialmente numéricas, desde edades muy tempranas. Ahora bien, el hecho de que el alumnado tenga un bajo nivel de competencias en edades iniciales no implica, necesariamente, que dicho déficit no sea recuperable en etapas posteriores. Por ejemplo, en la Figura 4.12, se observa que los jóvenes franceses de 15 años han conseguido cerrar la brecha en su nivel de competencias, respecto a lo observado a los 9/10 años de edad, y situarse ligeramente por encima de la media de la OCDE. En el caso de España, se aprecia una cierta mejora –las escalas de TIMSS, PIRLS y PISA no son directamente comparables– pero no alcanza para situarse, al menos en el nivel medio de la OCDE. Respecto a los países de referencia, los jóvenes españoles de 15 años solo superan, en matemáticas, a Rumania; en ciencias, a Rumania e Italia; y, en competencias lectoras, a Rumania. Resulta relevante apuntar aquí, en cualquier caso, que los resultados de España en la prueba de competencias lectoras en la ola 2018 de PISA deben ser interpretados con precaución, ya que un porcentaje 16 Tanto TIMSS como PIRLS dividen su escala de resultados por niveles, yendo del muy bajo y bajo hasta el avanzado. Para más detalles al respecto puede consultarse Mullis et al. (2012a; 2012b).